El PSOE rechaza la propuesta "fallida" de Feijóo para gobernar dos años e ironiza con que le pida a Sánchez "derogar el sanchismo"

El 'no es no' que Pedro Sánchez abanderó en 2016 para negarse a la investidura de Mariano Rajoy regresa de nuevo, aunque esta vez quien solicita poder gobernar es Alberto Núñez Feijóo.
El 'no es no' que Pedro Sánchez abanderó en 2016 para negarse a la investidura de Mariano Rajoy regresa de nuevo, aunque esta vez quien solicita poder gobernar es Alberto Núñez Feijóo.
El 'no es no' que Pedro Sánchez abanderó en 2016 para negarse a la investidura de Mariano Rajoy regresa de nuevo, aunque esta vez quien solicita poder gobernar es Alberto Núñez Feijóo.
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo (i), espera al presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez (d), a su llegada a una reunión en el Congreso de los Diputados, a 30 de agosto de 2023, en Madrid (España).
Jesús Hellín / Europa Press

El pasado siempre vuelve. El 'no es no' que Pedro Sánchez abanderó en 2016 para negarse a la investidura de Mariano Rajoy regresa de nuevo, aunque esta vez quien solicita poder gobernar es Alberto Núñez Feijóo y el secretario general del PSOE ocupa la Presidencia del Gobierno en funciones. Hay otra diferencia fundamental en el discurso del PSOE, ya que ahora se ven capaces de armar una mayoría que se lo permita -y esto incluye al Junts de Carles Puigdemont, además de a Sumar, ERC, EH Bildu, PNV y BNG-. 

"El PSOE no va a apoyar la investidura de Feijóo", ha comunicado la portavoz del partido, Pilar Alegría. La también ministra de Educación ha comparecido en Ferraz, cuartel general de los socialistas, para dar cuenta de la reunión que han mantenido esta mañana Sánchez y Feijóo a petición del segundo. El hecho de que quien haya reaccionado públicamente haya sido Alegría y no el presidente ya da buena muestra de la importancia que le dan desde el partido. El presidente del PP, en cambio, sí ha dado una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, donde se ha celebrado una cita que ha durado poco menos de una hora.

En el encuentro, según detallan fuentes del PSOE, el presidente en funciones le ha exigido que finalicen las "llamadas al transfuguismo" y que se renueve "de una vez por todas" el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), cuyo mandato lleva caducado "más de 1.700 días". El candidato a la investidura ha propuesto, por su parte, un pacto que incluye la Presidencia para el PP durante dos años y seis grandes acuerdos para evitar el bloqueo y "desactivar" al independentismo. "Han pasado de derogar el 'sanchismo' a rogar al 'sanchismo'", ha resumido Alegría, que ha ironizado con que a Feijóo le han faltado "aptitudes de persuasión" y ha asegurado que antes de pactar cualquier cosa se ha de renovar el órgano de gobierno del Poder Judicial.

Así las cosas, el guion no ha tenido cambio alguno a lo que ya estaba previsto. El lunes, cuando se produjo la llamada de Feijóo a Sánchez, el PSOE anticipaba que, pese a acudir a la reunión "por respeto al rey Felipe VI y al proceso de investidura", el acuerdo sería difícil. Con todo, desde Ferraz insisten en que Feijóo "está equivocado" en la "lectura" de los resultados que dieron las urnas el pasado 23 de julio. "Si hubiera habido mayoría entre PP y Vox, estaríamos hablando del nuevo gobierno", ha reflexionado la portavoz.

Alegría ha vaticinado que los días 26 y 27 de septiembre, cuando se celebra la investidura, Feijóo tendrá "172 votos a favor, los mismos que tiene ahora": "No tiene mayoría, fracasó". En este sentido, el PSOE asegura que la investidura "fallida" -que incluso dentro del PP la ven "complicadísima"- solo tiene un objetivo, que pasa por "asegurar la supervivencia política" de Feijóo. “No está pensando en la estabilidad de su país, solo en su pellejo. Si alguien dudaba que con esto Feijóo buscaba proteger su carrera, con la propuesta de los dos años se demuestra”, ha continuado.

El PSOE negociará sus apoyos este mes

Otro de los mensajes lanzados desde Ferraz es que no se van a quedar de brazos cruzados mientras Feijóo negocia. Con "discreción y prudencia", pero los socialistas pretenden aprovechar estas semanas para negociar con el resto de partidos con los que quieren armar una nueva mayoría de la investidura. Aunque el precio de ese apoyo sea una amnistía a los acusados por el procés que los socialistas rechazaban la pasada legislatura y ahora dejan en el aire. "Nuestro marco ha sido siempre la Constitución", ha insistido Alegría.

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